viernes, 5 de enero de 2024

Rubén Martín Díaz: Gorriones

 En soledad,

aunque no lo precise,

he puesto mi mirada entre las cosas

que todos tienen cerca

y nadie ve.


Extraño es contemplar la realidad

sin prisas,

sin lamentos ni agobios,

seguro de alcanzar lo perdurable,

lo que queda -en esencia-

desnudo al despojarlo de su cáscara.


Y es la pura verdad, que me golpea.

U es tan cierto que duele.


Alguien dijo que un pájaro 

tan pobre como lo es

un sencillo gorrión de la ciudad

no canta,

que no puede cantar,

que es este un don de largo inmerecido

para un ave discreta.


En mis poemas, sin embargo,

los gorriones elevan su conciencia

por encima de todo,

entonan melodías sorprendentes

que propagan sus límites

y despejan el aire revelado

del humo de vehículos y fábricas.


En el ciclo latente de la vida

y en el propio poema,

no todo está perdido ni es real

lo que real parece.




Rubén Martín Díaz

en Lírica industrial.

Ediciones Rialp.

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