sábado, 25 de mayo de 2024

Almudena Sánchez: Tres poemas de Gramática de mi madre.

 MASCULINIDAD

Crezco y es grande la desilusión:

las orejas son las de mi padre.



VENENO


Toco el piano para e oigas


Do-re-mi-fa-sol


Y tu orgullo electrifique 

los guantes de podar.

Y de la tela de los guantes 

salga un rayo 

que parta en dos el ciprés, 

la palmera y el cactus aburrido.


Cuánto jardín 

para tan poca catarsis.


si me trago tus semillas 

a golpe de medicamento 

es para que florezca algo 

dentro de mi estómago: 


un magnolio.


He hablado con mis tripas: 

son peores que mi cabeza 

cuando imagina ecosistemas 

y bandadas de estorninos 

volando por ahí.


El otro día vi un hierbajo 

indomesticable.

Era hermoso entre tanta pulcritud.


Ojalá una serpiente nos vigile hipnótica 

y nos quedemos inertes, 

algo erizadas, 

compartiendo ese terror salvaje.



TRÍPTICO DE LO QUE NO


Tres cosas no acaban nunca-


La guerra.

La sed.

Y la madre.






Almudena Sánchez

en Gramática de mi madre.

La uña rota. 




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